La quesada es otro postre típico pasiego. Se compone de leche de vaca cuajada que se acompaña de mantequilla y harina de trigo, huevos y azúcar. La masa se suele aromatizar la mezcla con limón rallado y canela en polvo.
En la preparación de la quesada se mezclan el azúcar y la mantequilla y se añade la leche cuajada (o la leche con un yogur), el limón y la canela. Seguidamente se incorporan los huevos, batidos y a continuación se añaden la harina y la levadura.
Una vez amasado se deposita en moldes de tarta, que se introducen en el horno durante una hora a 180 °C, hasta que se dore su superficie. Se puede servir caliente o frío. La quesada tiene la apariencia de flan, pero la consistencia del pudín, y tiene un exquisito sabor, no muy dulce pero tampoco salado como el queso curado.